sábado, 10 de diciembre de 2011

MISFITS| O cómo convertirte en un sucedáneo de ti mismo

Ya van dos episodios de MISFITS tras los cuales no me he puesto a escribir. ¿Motivos? Pues tampoco es que lo haya pensado demasiado. Básicamente que, por un lado, llevar un blog de reviews de series (más si te enrollas como yo cuando escribes) es tarea ardua, y lo estoy comprobando. Y por otro lado, para qué nos vamos a engañar, a uno le salen compromisos por todas partes y ya no tiene tanto tiempo libre como antes. Así que el análisis lo hago en mi cabeza, pero no se traduce en palabras.

La tercera razón para que no escriba, en concreto sobre MISFITS, es que honestamente no me está motivando absolutamente nada. Y claro, la motivación ayuda en estas cosas. Es como el calentarse en el sexo. Cuando no hay por dónde cogerlo porque no hay ganas, eso se puede solucionar con motivación. Si tampoco hay motivación, entonces espérate un poco, que la libido se ha tomado un descanso.

MISFITS me está empezando a aburrir... Quizá ya lo hacía desde el principio de esta temporada. Sin embargo  no estaba el tema como para exigir: aún no sabíamos cómo iba a funcionar esto, qué ritmo o qué camino iba a llevar, cómo afectaría a la serie la ausencia de alguien tan carismático como Nathan... En fin, todos conocemos estas razones.

Con ya 6 capítulos emitidos en esta tercera temporada, MISFITS se ha ido degradando, se ha ido convirtiendo en un sucedáneo de sí misma, no entretiene tanto, no es tan transgresora (de hecho ya se permite moralinas más propias de Modern Family), o bien se regodea en lo guays que son por transgredir. No hace falta investigar mucho para reconocer, con dolor, que MISFITS ya no es lo que era.

Lo digo más peyorativamente que otra cosa, pero también es de justicia decir que esta serie tiene su calidad, tiene su propio rollo al que todos hemos entrado, y que aún guarda sus puntazos y se marca buenos episodios. La gente habla de que el de los nazis fue el mejor. Ya se puede ver por mi review que no me entusiasmó demasiado. Casi diría que los episodios que más me han entretenido-gustado han sido el segundo (Curtis-Melissa, puro MISFITS en el sentido de establecer una trama a base de transgresión y no convencionalismos), el del chaval pesado que quería ser un superhéroe y dibujaba lo que iba a ocurrir, y diría también que el último, que llevaba una trama de descubrir algo tras una noche de borrachera y polvo, y qué mejor que por parte de Rudy, que como dicen por ahí, sin hacer tantos chistes sobre sexo anal incluso hace más gracia. Y la hace.

De hecho, ahí volvemos a ver lo que es MISFITS, en ese detalle de que una chica tiene el poder de hacer que a un tío se le caiga el pene. El sueño de muchas mujeres, y justo es decir que de muchos hombres (y no necesariamente me refiero a los homosexuales: para todo hombre, es una gran fantasía vengativa desear que a un tío se le caiga el pene, sabedores de la importancia que (no nos engañemos) en nuestro instinto más primitivo damos a nuestro miembro viril... Con este último episodio me he reído bastante, y me he reído con Rudy sobre todo. Y eso está bien, porque además no me ha recordado a Nathan tanto como en otros capítulos. Eso también es bueno. Por otra parte, de lado, nos dejan ver otro poco de la trama de Curtis, que como decía una amiga mía, algo va mal si el personaje más interesante esta temporada es él. Y es que su doble personalidad sexual es un puntazo, y de nuevo vuelven a transgredir con esa naturalidad que les falta a los norteamericanos a veces, provocando un auto-embarazo. Qué menos!! Esto, por suerte, nos enlaza con un Curtis que no quiere ya ese poder, y así el amigo traficante va a poder dejar de dar el coñazo, a nosotros, a Kelly, y a todo el mundo. Bueno, a todos menos a su novia, que parece que no la quiere dejar en paz ni siquiera en la tumba (a todo esto: ¿resucitarán también al "probation worker"...?)

Y es que vale. Kelly se ha echado unos cuantos polvos con el traficante, el tío tiene su morbo, y todo lo que se quiera. Pero se están alargando, y está resultando un hombre muy coñazo. Molaba más con traje, tras su escritorio, repartiendo poderes. A ver si con este paso para atrás que ha dado en su relación con Kelly (o que espero que dé...) se va apartando y volvemos a tener a una Kelly de verdad en MISFITS. Porque ya es hora de reconocer que Kelly en esta temporada es una parodia de sí misma. Y eso le quita todo el encanto a esa transgresión de la que hablo.

¿Qué hice cuando terminé el horriblemente mediocre y ridículo episodio 5? Me vi el episodio piloto, señoras y señores. Era tardísimo, tenía sueño, pero me lo puse un rato. Y ese rato duró los 45 minutos. Y me di cuenta de varias cosas. Primero, que es un episodio piloto cojonudamente escrito e interpretado, y que con naturalidad va a saco desde el principio. ¡Es que hasta Curtis tenía líneas de diálogo buenas! Todo fluía. Ahora no tengo esa sensación de fluidez en los diálogos, son como cosas tontas hablando... Y además (sigo con el piloto) su argumento base era original y verosímil (entiéndase el concepto de verosimilitud en un relato...). No falla nada, no me sobraba nada. Y lo disfruté como un enano, igual que cuando lo vi por primera vez.

Otra de las cosas que pensé fue precisamente que eso, amigos, eso es MISFITS, y no lo que están haciendo ahora, que no tienen ni pies ni cabeza. La segunda temporada fue parecida , pero tenía otros puntos a su favor. Aquí todo es caos de forma negativa, y no hecha a posta.

Eso era MISFITS no necesariamente porque estuviera Nathan, que sobra decir que también, sería de ilusos engañarse. Pero me fijé más en Kelly, que no era una parodia de sí misma, y que no soltaba un "focking (algo)" cada dos por tres para hacer la gracia. Lo decía desde dentro, qué coño, y era muy chunga, pero chunga de verdad: ese era su encanto. Y a mí Kelly no me ha cansado hasta esta temporada. Me fijé también en Simon, que con su rollo "creepy-emo" era más misterioso y su evolución fue la leche: una evolución que se ha estancado completamente, y es una pena. Todo debido a su relación con Alisha, que sinceramente molaba más cuando iba de "sé que estoy buena y me follo a todo lo que me apetezca". A mí Alisha, ahora, no me pone, ni me hace tanta gracia. Y para muestra, varios botones.







El momentazo "Do I suck or blow?" de Alisha pasa a la posteridad. Aparte del alto contenido erótico-sexual de la escena (que es impagable e indiscutiblemente morboso), la historia que se marca es enorme, y nos describe al personaje en dos minutos en los que Antonia Thomas se lució mucho.

En definitiva, no sé. Esas son mis impresiones. Sigo viendo la serie porque me considero un tío fiel y porque aunque me ponga drástico y lo exagere un poco todo, en el fondo sólo es una forma de hablar, y la serie no me sobra verla. Y como cuando escribí sobre The Walking Dead, me indigno porque sé que lo pueden hacer bien, y no lo están haciendo. Recomiendo a todo el mundo verse de nuevo el piloto. Sólo entran ganas de verse las dos temporadas otra vez (excepto el capítulo 4 de la primera, donde sólo se salva la trama de Nathan con sus chuches, y donde los viajes en el tiempo de Curtis le condenaron al fracaso y a la etiqueta de "coñazo de hombre" para el resto de sus días). Sólo me sale decir aquello de: WE WERE SO BEAUTIFUL!!! Que creo que esta vez viene al pelo sin la típica gratuidad. "You're wearing cardigans!!"


4 comentarios:

  1. Dos cosas:

    1. Me he leído la review entera, probablemente porque estoy mala y no tengo nada mejor que hacer.

    2. A mí este capítulo me ha dado esperanzas. Parece que, a falta de dos para terminar la temporada, la cosa va hacia algún lado. El resto de la temporada me parecía una eterna repetición del horrible capítulo de la leche: pasan cosas que se van de las manos y al final se solucionan.

    P.d. ¿Qué dijiste que significaba Fuck You?

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  2. Mira que fue malo el capítulo de la chica en coma. Especialmente porque todo espectador sabía perfectamente que Kelly no iba a morir.

    Una de las cosas que más penita de esta temporada es que se están desperdiciando algunas posibles tramas cojonudas, como el embarazo de Curtis o la posibilidad de que la iguana de Seth viaje en el tiempo y la líe parda (lo llevo esperando secretamente desde el episodio de los nazis)a favor de no se sabe bien qué. No obstante, sigo teniendo esperanzas: Misfits es una serie en general bastante bien escrita y con un trío de actores cojonudos (Rheon, Socha y Gilgun), así que las posibilidades de que remonte el vuelo son muchas. Pero, por favor, que haya una trama coherente ya y se haga algo con Curtis y Alisha, que tienen tanta profundidad como un folio.

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  3. A escasas horar de ponerme a ver el último(!) episodio de la temporada, y totalmente aterrada por la que puedan liar, no quería dejar de decirte que estoy totalmente de acuerdo con tu balance de lo que ha sido la temporada hasta ahora: un despropósito!

    Y con el episodio 3x07 te han vuelto a dar la razón: totalmente negados para hacer guiones de género. Los peores zombies de la historia.
    Y como decía alguien por ahí, desde cuándo hay animadoras en UK?!

    Hoy Alberto Rey ha escrito una definición de "temporada" que me ha gustado mucho, y alguien debería recordársela a los guionistas de Misfits:

    "Pocas series han entendido últimamente el concepto “temporada” mejor que ésta (Broadwalk Empire). Pocas han respetado mejor la “season” como unidad narrativa, como contenedora de arcos argumentales definidos, de personajes coherentes (lo cual no implica que no puedan ser contradictorios, pues ahí está su riqueza) y de conflictos claros."

    Aún así, me alegro de que hayan confirmado 13 episodios para la 4ª temporada.

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  4. Me encanto tu post. Lo puse en el post de la temporada, en Mediavida.com

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